¿Cuál fue el legado de Rodrigo Borja, expresidente de Ecuador (1935-2025)?
Abogado, escritor, periodista y académico, Borja fundó la Izquierda Democrática y llegó a la Presidencia en 1988 tras una larga trayectoria pública.
Borja fue testigo y actor clave en uno de los momentos más transformadores del Ecuador: el Gran Levantamiento Indígena de 1990, liderado por la CONAIE. Por primera vez en la historia, un gobierno aceptó sentarse a negociar de igual a igual con las nacionalidades indígenas, reconociéndolas como interlocutoras políticas legítimas.
Las demandas eran claras e históricas:
• Territorios ancestrales legalizados
• Educación intercultural bilingüe
• Reconocimiento del Estado Plurinacional
• Solución al acceso al agua
• Fin a la contaminación petrolera
• Valoración de la medicina indígena
Bajo el gobierno de Borja, ese diálogo, impulsado también por la mediación de la Iglesia progresista, permitió:
– Los primeros acuerdos sobre el reconocimiento de tierras comunitarias
– Las bases para un proceso que ya se llevaba adelante con la educación bilingüe
– Un precedente fundamental para la Constitución de 1998 y el reconocimiento de los derechos de pueblos y nacionalidades indígenas del Ecuador.
El levantamiento fue la semilla de cambios profundos que redefinieron al Ecuador como un país diverso, donde los movimientos sociales ganaron voz propia. Hoy, al recordar a Borja, también honramos ese momento en que el Estado aprendió a escuchar. Un presidente que, en un contexto complejo, abrió espacios que antes no querían ser abiertos.
