Genocidio en Gaza. Indígenas palestinos sacrificados

El desastre humanitario actual entre Israel y Palestina tiene una larga historia más allá de los ataques de Hamas – la autoridad militante de Gaza – de 7 octubre, 2023 contra militares y ciudadanos Israelíes, un ataque que resultó en más de 1,200 muertos israelíes y la captura ilegal de más de 130 rehenes israelíes e internacionales por Hamas.

El establecimiento del estado de Israel tiene raíces de conflicto armado contra los pueblos indígenas de Palestina desde la formación del estado por la ONU en 1948, resultando en la expulsión violenta de más de 750,000 Palestinos de sus hogares, empresas, terrenos y autoridades locales. La Declaración de Balfour de 1917 y el plan de la ONU de 1948 habían declarado la división del Mandato británico de Palestina y existencia pacífica de dos países, Israel y Palestina, libres de la dominación del imperio británico. Pero Israel luchó contra sus vecinos árabes y aprovechó de la “independencia” para tomar control de los territorios que eran destinados a los palestinos y establecieron un estado colonial con carácter ilegal de apartheid, con discriminación contra los palestinos, procesos de “limpieza étnica” negando sus derechos humanos y continuando con la apropiación de casas y terrenos palestinos, sin consecuencias legales de la comunidad internacional. Hasta ahora, hay más de 5 o 6 millones de palestinos refugiados y exiliados en Gaza, Transjordania, Jordania, Libano y Syria.

La resistencia armada de Hamas contra Israel es moral y legalmente complicada por ser una combinación de actos legales e ilegales de pueblos “ocupados” contra fuerzas militares y civiles israelíes. La resistencia armada de palestinos contra las fuerzas militares de ocupación Israelí es considerada legal por ley internacional, pero actos violentos contra civiles son considerados actos terroristas, violaciones de derechos humanos y crímenes de guerra. El ataque de Hamas de 7 octubre fue una combinación de resistencia y terrorismo, y toda la población de Gaza está pagando el precio brutal.

Las represalias israelíes contra pueblos palestinos desde octubre 2023 han resultado en una catástrofe sin precedentes de destrucción masiva en Gaza, de casas, edificios, escuelas, hospitales, empresas, universidades, ambulancias, sitios culturales y religiosos, e infraestructura básica de agua, comunicación, y electricidad. Israel ha impuesto un estado de sitio ilegal, bloqueando transporte y entrega de ayuda humanitaria, comida, medicinas, y agua. El asesinato de periodistas, profesores universitarios, doctores, enfermeras, personal de primeros auxilios y ayuda humanitaria y la destrucción de sitios internacionales de salud, educación, y administración pública ha dejado a Gaza en un estado de casi colapso total, con más de 1.5 millones de personas sin casa, sin comida y agua, sin servicios médicos, y sin protección contra ataques militares diarios por mas de 6 meses. Este es un infierno que se puede ampliar cualquier día si Israel entra en conflicto militar con otros países árabes y musulmanes de la región.

La taza de mortalidad humana en Gaza es extrema. Miles de muertos están siendo aplastados bajo los escombros de edificios y casas destruidas. Hasta ahora, más de 33,000 palestinos han sido asesinados y 76,000 heridos por bombardeos aéreos, ataques de tanques y artillería israelí, con armamentos proporcionados por los Estados Unidos y la Unión Europea, que ahora pueden ser considerados cómplices en los crímenes de guerra de Israel. La mayoría de los heridos no tienen acceso a cuidado médico, debido a la destrucción casi total del sistema hospitalario de Gaza. Más de 14,000 de los muertos son niños y adolescentes. Más de mil niños han sufrido amputaciones de piernas y brazos, muchas veces sin anestesia o analgésicos para el dolor extremo, y sin condiciones básicas de higiene hospitalaria contra infecciones.

La situación humanitaria ha sido agravada aún más por acusaciones de complicidad, sin evidencias, contra unos empleados de UNRWA en los ataques de octubre 2023. UNRWA es la agencia central establecida por la ONU en 1949 para coordinar servicios y recursos para los millones de palestinos exiliados por el establecimiento violento del estado de Israel encima de las tierras ancestrales palestinas. Como resultado de las acusaciones contra UNRWA, muchos países han suspendido sus apoyos económicos a UNRWA, creando un desastre aún más agudo para los civiles de Gaza, que ahora están sufriendo de hambruna mortal afectando casi 2 millones de palestinos refugiados en el sur de Gaza, donde viven en campamentos improvisados de carpas, donde un inodoro sirve para 700 personas, y una ducha para más de 4,000 personas. Esta concentración humana está resultando en una taza de enfermedades transmisibles 25 veces más graves que el normal, con impacto principal en bebés y niños.

La situación es tan grave que, en diciembre 2023, el gobierno de Sudáfrica hizo una denuncia formal de genocidio contra Israel en la Corte Internacional de Justicia, que ha sido aceptado como plausible para investigación formal. La Corte ha emitido una orden formal a Israel para suspender actividades militares en y contra Gaza, pero el gobierno israelí ha declarado que nada va a impedir sus planes para la eliminación total de Hamas como entidad política en Gaza. La situación es aún más complicada por el involucramiento de otros grupos militantes en Líbano, Yemen y Syria, con apoyo de Irán. Y hay varios países que han suspendido sus relaciones comerciales, diplomáticas y militares con Israel, y más de 59% de los países del Sur Global han indicado apoyo para más acciones legales en la Corte Internacional de Justicia. Más de 140 países de la ONU han reconocido Palestina como nación, pero los EEUU ha bloqueado el voto en el Consejo de Seguridad para completar el reconocimiento.

Por estas razones, tenemos una Declaración de solidaridad con los pueblos hermanos de Palestina, porque siguen sufriendo bajo condiciones de colonialismo brutal e ilegal, sufriendo violaciones de derechos humanos por décadas sin alivio o justicia. La Declaración demanda:

  • Un cese de fuego inmediato.
  • Restauración inmediata de ayuda humanitaria.
  • La liberación bilateral inmediata de todos los rehenes retenidos en Gaza por Hamas y de los civiles palestinos detenidos ilegalmente en Israel.

Rechazamos la propaganda sionista que implica que cualquier crítica de Israel equivale a antisemitismo. La realidad es que el mundo está observando las atrocidades cometidas por el Estado de Israel, masacrando a civiles, de los cuales más de catorce mil son niños. Denunciar esta violencia del terrorismo de Estado no es antisemita, sino un imperativo humanitario universal. Los palestinos son también pueblos semíticos de una antigüedad compartida con los judíos desde tiempos bíblicos. El deplorable antisemitismo que si existe en el mundo no puede servir como excusa para desviar críticas legítimas de Israel por una conducta que viola los derechos humanos o las leyes internacionales de guerra.

Afirmamos la responsabilidad ética y urgente de la Corte Internacional de Justicia de juzgar las acusaciones de genocidio presentadas por Sudáfrica contra las fuerzas militares israelíes, y de arbitrar medidas urgentes para obligar al Estado de Israel a detener este genocidio contra el pueblo palestino.

Apoyamos y exigimos el restablecimiento inmediato y total de los fondos de la UNRWA para entregar ayuda humanitaria a los más de 5 millones de palestinos en todo el mundo y la convocación de una Corte Suprema de Naciones Indígenas para supervisar, junto con las autoridades de los organismos internacionales de la ONU, incluidos representantes de Pueblos Indígenas, para iniciar un proceso de reconstrucción, restitución y reparación al pueblo palestino. Esto debería incluir el establecimiento de un plan para el retorno de Palestinos exiliados, a sus hogares, tierras y negocios, guiado por las directrices de la Resolución 242 de 1967 de la ONU.

Autor: Fred Hosea PhD

La Declaración completa, con más detalles, se puede encontrar en este link:
https://www.dropbox.com/scl/fi/zcwcwy4ks4og7ln5zqajk/DECLARACION-Final-DE-LOS-PUEBLOS-INDIGENAS-DEL-MUNDO-rev.-7final.pdf?rlkey=xka0qw258ker02g47ve8dmxj3&dl=0

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