La sequía que afecta al río Amazonas ha alcanzado niveles críticos, provocando una crisis ambiental y humanitaria sin precedentes. El nivel del río ha disminuido significativamente, afectando la navegación, la pesca y la agricultura en la región.
La combinación de factores como el cambio climático, la deforestación ilegal a causa de la minería, la degradación del bosque, la falta de lluvias y la sobreexplotación de recursos hídricos ha generado un impacto devastador en la biodiversidad de la región amazónica. La vida silvestre y las comunidades que dependen del río son las más afectadas.
Los ríos de la cuenca amazónica han registrado mínimos históricos, lo que ha impedido a los barcos que transportaban personas y mercancías poder llegar a sus destinos y ha dejado aisladas a las comunidades indígenas y ribereñas de Brasil.
La crisis humanitaria es evidente. La falta de acceso a agua potable y alimentos ha generado una emergencia en la región. La pesca y la agricultura, principales fuentes de ingresos para estas comunidades, se han visto drásticamente reducidas.
Según Luciana Gatti, investigadora del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe), “es una catástrofe anunciada”. Su seguimiento ha demostrado cómo el bioma amazónico va perdiendo su capacidad de generación de lluvias y de almacenamiento de carbono a medida que avanza la deforestación.
Aunque se han unido entidades de la triple frontera (Colombia, Perú y Brasil) para implementar medidas de emergencia para abastecer de agua a las comunidades afectadas y han anunciado planes de reforestación y conservación del bosque, varios expertos critican la falta de una estrategia a largo plazo para abordar la sequía y proteger el río Amazonas, la fuente de agua más grande de América. Es importante señalar que, para las comunidades del Amazonas, lo que está ocurriendo es una amenaza a la vida. El río es parte de su identidad, su cultura, su historia, es su razón de ser.
Fuente: Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI), Ministerio del Ambiente y Agua, Organizaciones no gubernamentales (ONGs) locales.